Ser Poeta es ser Arqueólogo del Alma

Uno de mis arquipoemas, salvado en un pendrive y publicado para que nunca más se pierda. Pese a que es de estructura muy simple, su cadencia al declamarlo no resulta incómoda y se logra sentir que muchos suspiros acompañaron su creación. Logra transmitir el mensaje con una claridad que asombra, resumido en los últimos dos versos. Se titula: Mil.

Mil

Mil veces he pensado en esto,
Mil veces y un poco más,
Tengo Mil cosas en mi mente,
Mil fantasías que contar.

El visitar contigo Mil lugares
Y de Mil paisajes tu memoria llenar.
Mil veces te diré te Amo,
Para verte sonreír Una vez más.

Mil trocitos de cielo vi en tus ojos,
Su belleza Mil poemas no podrían contar,
Aunque la luz de Mil estrellas
A esos Mil poemas no pueda opacar.

He robado Mil suspiros a tus labios
Y hallado Mil tesoros en tu piel.
Hoy Mil ocasos te dedico Niña,
Por pasar contigo Una noche más.

En Mil viajes partiría,
Para encontrarte en Mil ciudades,
Y allí, en Mil calles sin nombre,
Abrazarte Mil veces más.

En Mil sueños te busco,
En Mil sueños o quizás más.
Mil deseos no cambio,
Por tener de tu piel Un recuerdo más.

Quiero que en Mil amaneceres juntos,
Te des cuenta entre Mil besos,
Que si me lo pidieses Mil veces,
Te amaría Mil veces y Mil más.

Mil ángeles cantarán nuestro idilio,
Y esas Mil voces me recordarán,
Que Mil vidas son muy pocas,
Para amar a Una sola como tú.

Camael, Blogging Out.